Tiempo de lobos

Todas las piezas en la vida de Heather Evans parecen desencajarse. Ha sido despedida como periodista debido a un incidente en su oficina de trabajo y ahora debe volver a su pueblo natal para afrontarse al suicidio de su madre.

Heather y su madre no habían mantenido una buena relación en años, por lo que nada la sorprende encontrar cartas dirigidas, no a su padre, sino a un asesino serial en una prisión de máxima seguridad ¿qué relación tienen estas cartas? ¿por qué su madre se escribía con un asesino serial? ¿Qué significa la nota de suicidio que ha dejado? Para encontrar las respuestas a estas preguntas Heather se reunirá de valor e irá a visitar al Lobo Rojo a prisión, quién sorprendentemente la recibe tras años de no querer hablar con nadie más.

Por otra parte, mientras nuestra protagonista se ocupa del funeral de su madre, comienzan a aparecer, nuevamente, mujeres asesinadas con sus cuerpos dispuestos de una forma en particular, demasiado similar a como lo hacía Lobo Rojo ¿es un imitador o nunca atraparon al verdadero culpable?

A lo largo de esta historia seguiremos a tres personajes principales. Heather, quien se obsesiona con las cartas de su madre, con el asesino serial que las escribió y con los nuevos casos de asesinato. Nikki, su mejor amiga que viaja para acompañarla en la investigación y también en su duelo. Por último, también conoceremos a Ben, un oficial de policía a cargo de la seguridad en la prisión de Michael Reave, el asesino serial conocido como El Lobo Rojo se encuentra cumpliendo su condena.

“Te estoy contando mi historia Heather, una y otra vez.

Pero no me parece que estés escuchando”.

Este libro no solo es un thriller bien psicológico, sino que también tiene elementos que rozan el terror y con eso, sale un poco de lo común, así que lo disfruté un montón. Es bastante gráfico y puede llegar a dar –no quiero decir impresión porque sería un montón- cierta sensación de incomodidad. Una novela intrigante por demás para aquellas que disfrutan las vueltas de tuerca y los libros que “chorrean sangre”.